La escasez de paltas chilenas ha provocado que los precios se disparen en el mercado nacional y ha llevado a un final temprano a la campaña de exportación. La producción se redujo entre un 40 y un 50% esta temporada, principalmente debido a la sequía que ha afectado la producción de frutas en el país durante más de una década. Las altas temperaturas, durante la fase de crecimiento también afectaron el cuajado de frutos esta temporada.

Al respecto, Cristian Soazo, gerente comercial de Agricom, señaló que a los productores se les pagaba hasta US$ 4,90 por kilo, mientras que el precio minorista había alcanzado los US$ 6,50 por kilo en los últimos días. “El mercado nacional es increíblemente caro. Estamos importando paltas de México y ahora de Perú para satisfacer la demanda”, agregó. “Con estos precios se acaba la temporada de exportación. Creo que veremos una caída en los volúmenes de exportación de más del 50 por ciento en comparación con el año pasado “, expresó.

En cuanto a las exportaciones, Soazo explicó que Chile ha luchado para competir con el alto volumen de fruta que sale de México y Perú. “Nuestro principal competidor, Perú, inundó los mercados en todas partes, particularmente en Europa. Al mismo tiempo, México exportó altos volúmenes de paltas a Estados Unidos a precios bajos, lo que al final nos dejó fuera del mercado”, explicó.

Soazo prevé que los exportadores sufrirían un impacto financiero significativo esta temporada, tanto como resultado de la pérdida de ingresos, como del costo de los materiales no utilizados, particularmente los empaques especializados requeridos para los programas de los supermercados. “Los ingresos por comisiones de ventas serán la mitad de lo presupuestado y los costos fijos son los mismos”, comentó.

Alza de precios en Chile: Efecto de la sequía

Las sequías son las principales causas por las que el precio de la palta se ha visto afectado. Carmen Gloria Lüttges, gerenta de unidad de paltas de Agricom, la segunda mayor exportadora del país aseguró que la sequía viene afectando la producción hace una década, “hay campos reducidos a tocón (árboles cortados hasta su base), a lo que se suma las temperaturas, muy altas durante el día y muy bajas en la noche”.