
AGROSAVIA identifica nueva especie de insecto que afecta a la guayaba, así como también las alternativas de control biológico. Esto irá en directo beneficio a una industria tradicional en Colombia, que involucra más de 600 familias y genera retornos por más de US$24 millones al año.
Desde el 2006 se identificó la presencia de una nueva plaga en guayaba (Psidium guajava) por daños visibles de perforaciones en el tallo de donde se desprendían restos de madera en forma de cilindros, los cuales se acumulaban en la base del tronco. Estos daños, en niveles severos, podrían ocasionar la muerte del cultivo.
Dentro del estudio realizado entre el 2013 y 2017 por los investigadores de AGROSAVIA de las sedes de Cimpa, Tunja, y Tibaitatá, se realizaron inspecciones y toma de muestras semanales de larvas en municipios de Boyacá y Santander. El proyecto se desarrolló con el fin de estudiar la biología, ciclo de vida, daño y enemigos naturales de la nueva especie en Colombia, a la cual identificaron como Simplicivalva ampliophilobia, reportada también en Costa Rica.
Para el control biológico, los investigadores hallaron evidencia de control por medio de hongos como por ejemplo: Lecanicillium lecanii, Metarhizium, Hansfordia sp. y Gliocladium sp. También se pudo identificar ejemplares afectados por insectos parasitoides, en este caso por Apanteles sp.
Gracias a la investigación «Estudios e indicadores epidemiológicos de plagas emergentes (anillador, talador y enrollador) en el cultivo de la guayaba» a cargo de Orlando Insuasty, Víctor Pulido con el apoyo de los profesionales Julio Ramírez y Xiomara Sarmiento se beneficiará una industria que lleva años de tradición en Colombia con más de 132 fábricas de bocadillo en el país con ingresos de más de 24 millones de dólares anuales.