
Se trata de un programa enfocado en rescatar los embriones que se producen dentro de los programas de cruzamiento de bananos.
Conocida como la enfermedad más letal que afecta a bananos en todo el mundo, el hongo Fusarium raza 4 Tropical se propaga velozmente por América Latina, región donde se produce el 80% de bananos que se consumen a nivel mundial.
Una manera de combatirlo es a través del mejoramiento genético de las plantas. Es lo que llevan a cabo investigadores de la Corporación colombiana de investigación agropecuaria (AGROSAVIA), quienes desarrollaron un programa para la obtención de plantas más resistentes, a partir de la introducción de materiales mejorados obtenidos en diferentes programas de mejoramiento a nivel mundial. Estos son integrados en un programa de premejoramiento genético que tiene como objetivo generar clones nuevos con resistencia a Fusarium.
Sin embargo, el mejoramiento genético en los bananos tiene como limitante los altos niveles de esterilidad femenina que dificultan la obtención de semillas. Por esta razón, explican los investigadores, los programas de mejoramiento genético en bananos deben hacer uso de estrategias biotecnológicas que permitan rescatar los embriones que se producen dentro de los programas de cruzamiento.
“En este tipo de especies es común utilizar otras estrategias biotecnológicas para la obtención de variabilidad genética, como es la inducción de variaciones somaclonales”, detallan.
Pese a ser una de las frutas más cotizadas y exportadas de América Latina, en 2021 los envíos cayeron un 2% (16 millones de toneladas) cifra que representó 400.000 toneladas menos que en 2020.
Según un informe publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Ecuador afectaron los mayores gastos derivados de la necesidad de mantener estrictas medidas de mitigación de fusarium que apareció en Colombia y Perú.
El segundo abastecedor de la región, Costa Rica y que se ubica como el tercer exportador de la Unión Europea, se mantuvo estable en el año pasado, con una exportación de 2,3 millones de toneladas.
En tanto, Guatemala, el tercer proveedor de la región, en cambio, tuvo una caída de 5% en 2021, a unos 2,3 millones de toneladas afectadas por la escasez de producción causados por los huracanes Eta e Iota. Asimismo, las adversidades climáticas también golpearon al sector bananero de México; los daños causados por los huracanes y las graves inundaciones en áreas cítricas en 2021 hicieron que los envíos del país cayeran un 3%, esto es, a 530 mil toneladas.
Colombia, el cuarto proveedor de la región, se ubicó con una producción aproximada de 2,1 millones de toneladas, un crecimiento del 3% en 2021.
En la zona del Caribe, las exportaciones también crecieron a un ritmo rápido el año pasado, llegando a las 600 mil toneladas, un aumento del 40% en comparación al 2020.